
En el corazón de México se encuentra Aguascalientes, un estado pequeño en tamaño, pero enorme en cultura, industria y esfuerzo humano. Su nombre, que significa “aguas calientes”, recuerda los manantiales termales que le dieron identidad hace siglos. Hoy, este rincón del país combina tradición con modernidad, y se ha convertido en un ejemplo de cómo lo local puede conectarse con el mundo.
Según el último censo, Aguascalientes tiene 1.4 millones de habitantes. Aunque no es de los estados más poblados, cada persona aporta a su desarrollo, ya sea en fábricas, en el campo, en comercios o incluso desde fuera de sus fronteras. Miles de aguascalentenses viven en Estados Unidos, y su apoyo es vital: en 2024 enviaron casi mil millones de dólares en remesas, dinero que representa más de la mitad del presupuesto estatal. Con estas aportaciones se construyen casas, se pagan estudios y se abren pequeños negocios, demostrando que el corazón de Aguascalientes también late desde lejos.
La economía del estado se sostiene sobre cinco pilares industriales que lo colocan como un jugador importante en el país:
Pero más allá de las grandes industrias, la creatividad de su gente se nota en cada esquina. En mercados y en internet, aguascalentenses venden productos que van desde artesanías tradicionales (mayólica, deshilado, cantera, cartonería y juguetes típicos) hasta ropa americana de marca como Guess o Hollister, bolsos y piezas de diseño moderno. Plataformas como MercadoLibre, Vivanuncios y Segundaynuevos.com han permitido que lo local llegue más lejos, mostrando que Aguascalientes sabe adaptarse a los nuevos tiempos sin olvidar sus raíces.
El mundo de los autos también refleja la dinámica del estado. Entre los vehículos nuevos más populares están el Nissan Versa, el March, el Kicks y modelos de Volkswagen y Hyundai, que se eligen por su accesibilidad y confiabilidad.
En el mercado de autos usados, la gente suele buscar modelos prácticos y resistentes, como:
Estos autos se distinguen porque son duraderos, económicos en gasolina y fáciles de mantener, lo que los convierte en la primera opción para familias, estudiantes y trabajadores.

Culturalmente, Aguascalientes también brilla. Su Feria Nacional de San Marcos es una de las más famosas de México, atrayendo a miles de visitantes cada año con música, baile, gastronomía y tradiciones. Caminar por sus calles es encontrar la unión de lo antiguo y lo moderno: desde un taller artesanal hasta un moderno parque industrial, desde un platillo tradicional hasta una tienda en línea donde se venden productos al mundo.
Aguascalientes es, en pocas palabras, un estado que demuestra que no importa el tamaño, sino la grandeza del corazón de su gente. Con sus industrias, sus artesanías, sus autos y sus remesas, este rincón del centro del país sigue creciendo y dejando huella. Es un lugar donde tradición y modernidad se dan la mano, y donde cada habitante, esté aquí o en el extranjero, aporta para que el estado siga avanzando con orgullo.
xcm